A pesar de que el torneo Clausura 2025 de la Liga MX Femenil ya llegó a su fin con Pachuca como campeonas tras vencer al América, este fin de semana las Águilas regresaron a la cancha para enfrentarse a su eterno rival, Chivas, en un emocionante partido amistoso que se celebró en Estados Unidos.
La cita fue en el Boc of California Stadium, ubicado en Los Ángeles, California. Este clásico nacional no solo revivió la rivalidad que se ha intensificado en los últimos años, sino que también recordó a los aficionados la reciente semifinal en la que ambas escuadras se cruzaron. Bajo la dirección de Ángel Villacampa, América salió por la victoria, mientras que Antonio Contreras llevó a Chivas a luchar con todo.
Inicio frenético con goles y emociones para ambos bandos
El inicio del encuentro fue intenso, con ambos equipos mostrando un gran compromiso por dominar el juego. Chivas empezó a presionar desde el primer momento, pero las azulcremas también lograron hacerse presentes en el área rival. Al minuto 17, Natalia Mauleón abrió el marcador para las Águilas, dejándolas a la cabeza. Justo poco después, Irene Guerrero anotó el segundo gol, avivando la esperanza de los aficionados.
Sin embargo, Chivas no se dejó amedrentar. Gabriela Valenzuela, tras un gran esfuerzo, encontró el primer gol para su equipo, encendiendo la chispa de la esperanza en su afición. La respuesta llegó rápidamente con un segundo gol de Viri Salazar, dejando el partido empatado 2-2 en un abrir y cerrar de ojos.
Un empate lleno de intensidad en la segunda mitad
Desafortunadamente, la alegría del gol para Chivas se vio empañada cuando Valenzuela sufrió una caída que la obligó a salir del campo, dando paso a Montserrat Hernández. Este tipo de situaciones recuerda lo impredecible que puede ser el fútbol y el valor de cada jugadora en un partido que se acerca tanto a una guerra deportiva.
La segunda mitad comenzó con más acción y suspense. Las Águilas, determinadas a retomar la ventaja, se lanzaron nuevamente al ataque, y Natalia Mauleón aprovechó un error de la defensa de Chivas, marcando el tercer gol de su equipo. Pero las rojiblancas demostraron su tenacidad nuevamente; Viri Salazar anotó su segundo gol, resultando en un espectacular empate temporario 3-3.
Un Clásico que reafirma la grandeza del fútbol femenil mexicano
Con el reloj corriendo en los últimos minutos, la tensión se palpaba en la atmósfera del estadio. Las emociones se dispararon cuando Damaris Godínez cometió una falta en el área, lo que llevó al árbitro a señalar el penal. Montse Saldívar se hizo cargo de la responsabilidad y, con una precisión admirable, marcó el cuarto gol que dio la victoria a Chivas en este encuentro amistoso.
Este Clásico Nacional Femenil no solo fue un espectáculo de habilidades y estrategias, sino también un recordatorio del compromiso y la pasión que estas atletas traen cada vez que pisan la cancha. La rivalidad entre América y Chivas sigue viva, y el eco de sus enfrentamientos seguramente continuará resonando entre sus leales seguidores.